El estudio de la historia, si se hace de manera viva, es apasionante y ameno además de muy necesario. Toda generación debiera poseer nociones y cimientos del compendio y la herencia histórica del país de uno y del mundo.
Es mediante la lectura de biografías escritas por un autor cercano el alma y posiblemente cuerpo, al momento histórico o personaje descrito, que nos forjamos nuestras opiniones y criterios de la historia con honestidad intelectual y conocimiento de causa. No os conforméis con repetir las opiniones y mejunjes pasados por agua de muchos libros de historia modernos. Buscad libros vivos, que haberlos háilos.
Es mediante la lectura de biografías escritas por un autor cercano el alma y posiblemente cuerpo, al momento histórico o personaje descrito, que nos forjamos nuestras opiniones y criterios de la historia con honestidad intelectual y conocimiento de causa. No os conforméis con repetir las opiniones y mejunjes pasados por agua de muchos libros de historia modernos. Buscad libros vivos, que haberlos háilos.
El hombre que cambió a China es una novela biográfica escrita por Pearl Buck, una prolífica escritora de finales del siglo diecinieve hija de misioneros presbiterianos que pasó considerable parte de su vida en China y vivió en sus carnes las guerras y conflictos que nos relata.